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Se trata de un impuesto por única vez para las empresas de servicios y los productores agropecuarios que tengan más de 400 héctareas. El intendente sostuvo que el valor es de 35$ por hectárea, lo que equivale a un alfajor Jorgito. 

En Laprida, los productores agropecuarios están que arden y es consecuencia de una medida que decidió tomar el intendente municipal, Pablo Torres. Mientras en el Congreso se debate el impuesto a las grandes fortunas, el mandatario local decidió avanzar en una suerte de impuesto municipal con el mismo objetivo. La idea es que esos fondos sean destinados para pagarles un bono a los trabajadores municipales y de la salud.

En el texto de la normativa se detalla que pagarán el impuesto de 35$ por hectárea para el caso de los productores agropecuarios, mientras que para las empresas de servicios y bancos el costo será de 35$ por usuario. Torres comparó el costo con «comprar un alfajor Jorgito, simple». 

«Nunca lo dije porque me parece que no hay que hacer bandera con esto, pero ante la aparición de ‘indignados’ que (por negarse a poner $35 para premiar a nuestras trabajadoras y trabajadores esenciales) reclaman que los políticos locales se bajen el sueldo, voy a tener que decirlo», sostuvo Torres en un posteo en sus redes sociales.

Productores agropecuarios pusieron el grito en el cielo y se esperan protestan durante esta semana. 

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