En el municipio gobernado por María José Gentile de Juntos por el Cambio, un inesperado escándalo sacude la gestión e involucra a una empresa extranjera por operar en la ciudad sin autorización oficial.
Una empresa israelí de tecnología agropecuaria estuvo operando en el Centro Municipal de Desarrollo Socio Productivo «San Cayetano» durante un año, sin que el Concejo Deliberante ni los vecinos tuvieran conocimiento oficial de su presencia.
El Concejo aprobó hace solo unos días la instalación de esta firma, pero un grupo de concejales opositores destapó la sorpresa: la empresa ya estaba en funcionamiento, sin licitación ni el paso por los procedimientos legales correspondientes. La situación genera fuertes sospechas y preguntas sobre la transparencia de la gestión municipal y la del ex intendente Mariano Barroso, quien aparentemente facilitó la llegada de la firma antes de dejar su mandato.
Las dudas no tardaron en surgir: ¿Qué operaciones realizó la empresa durante ese año en 9 de Julio? ¿Cómo es que nadie en el gobierno local informó a los vecinos ni al Concejo? A pesar del silencio de Gentile, el tema ha generado un clima de tensión que podría escalar rápidamente, con la sombra de un posible escándalo de corrupción asomando en el horizonte.
El «milagro» de invisibilidad que permitió que una empresa internacional opere sin supervisión oficial ya está bajo la lupa, y lo que comenzó como un secreto municipal podría convertirse en el primer gran problema que enfrente la gestión de Gentile.